Chevalier d'Eon un travestí del siglo XVIII

Chevalier d'Eon, (1728-1810), conocido generalmente como el caballero de Eón , era un diplomático francés , espía y soldado. Sus primeros 49 años los pasó como un hombre, y sus últimos 33, como una mujer. Después de su muerte, un consejo de los médicos descubrió que el cuerpo de d'Éon era anatómicamente masculino.

Chevalier

La pintura que está encima de este texto es del siglo XVIII, en él aparece una señora un poco varonil de mediana edad. Resulta que esta pintura, ha sido descubierta por Philip Mould en una sala de subastas de Nueva York. Una minuciosa investigación ha descubierto una rica y colorida historia. La investigación impulsada, tuvo un descubrimiento sorprendente, resulta que es un retrato del legendario espía, diplomático y travesti, Chevalier D'Eon que se había perdido en 1926.

La historia de D'Eon es una de las biografías más notables del siglo XVIII. El reciente redescubrimiento de este retrato al óleo tiene un gran significado histórico. Hasta el redescubrimiento de este retrato, no había ninguna imagen esclarecedora de D'Eon. En su origen el título de la pintura era, "Retrato de una mujer con una pluma en el sombrero".  La investigación realizada por Philip Mould ha demostrado d que el cuadro es de Thomas Stewart que se especializó en pintar actores y escenas teatrales en Londres en la década de 1790. En ese tiempo D'Eon estaba compitiendo en torneos de esgrima en los locales londinenses.

A D'Eon se le conoce como la "Patrona de travestis" y la palabra "eonismo", se deriva de su apellido. Los padres de D'Eon eran provincianos franceses de clase media. Sobresalió en la escuela y en 1756 fue reclutado por una red de espías llamada "Le Secret du Roi", que trabajaba para el rey Luis XV. El monarca envió D'Eon en una misión secreta a Rusia para espiar a la emperatriz Isabel e intrigar con la facción pro-francesa contra los Habsburgo. Se dice que D'Eon se disfrazó de mujer para hacerlo, e incluso se convirtió en dama de honor de la emperatriz.

En 1763, después de haber pasado una temporada heroica con los "Dragoon Guards", donde se distinguió como un gran esgrimista, D 'Eon fue enviado a Londres con el título de Embajador Especial de Francia. Su verdadera misión era espiar para el rey y recopilar información para una posible invasión. A pesar de que hay documentos privados que demuestran que él iba a comprar corsés femeninos, D'Eon lo mantenía oculto.

Después de un año, D'Eon fue sustituido como embajador por el conde de Guerchy. Furioso y humillado al ser reducido a su antiguo rango de secretario, D'Eon decidió desobedecer órdenes de regresar a Francia, afirmando que el nuevo embajador había tratado de asesinarlo. En un esfuerzo por salvar a su posición en Londres, D'Eon publicó la mayor parte de la correspondencia diplomática secreta. Pero D'Eon fue cuidadoso de mantener en secreto los documentos más sensibles. Con estos documentos, D'Eon tenía el rey en sus manos, y continuó trabajando como espía.

A partir de estos momentos, D'Eon comenzó a vestirse públicamente como una mujer. Era conocido por su gran inteligencia, pero también por su falta de encanto femenino. La sociedad del siglo XVIII resultó mucho más aceptable para él como mujer que como hombre. En 1774, después de la muerte de Luis XV, D'Eon trató de negociar un regreso del exilio. Se le permitió regresar a Francia pero fue desterrado a su ciudad natal de Tonnerre durante seis años.

D'Eon regresó a Inglaterra en 1785. Había perdido su pensión después de la Revolución Francesa y tuvo que vender una amplia biblioteca que había sido la pasión de su vida. Empobrecido, seguía siendo famoso, D'Eon actuaba en los escenarios de Londres y Dublín, donde actuaba como una esgrimista de renombre, hasta que fue herido de gravedad en 1796. En 1804 fue encarcelado por sus deudas, pero puesto en libertad un año después, gracias a que firmó un contrato para una autobiografía.

La "señora" D' Eon

El libro nunca fue publicado, porque D'Eon se quedo paralítico después de una caída. Sus últimos años los pasó con una viuda,la señora Cole. Los doctores que examinaron el cuerpo después de su muerte descubrieron sus atributos masculinos.

Vía: ArtDaily