El urinario que es Monumento Nacional de los Países Bajos

Los urinarios públicos generalmente se consideran el último recurso para una vejiga llena. Rara vez están limpios y suelen ir acompañados de un olor bastante desagradable. Muy raramente son vistos como obras maestras arquitectónicas o monumentos nacionales. Sin embargo, el orinal de Havenplein en Leiden (Países Bajos),es ambas cosas.

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El urinario fue construido en 1930, se instaló en el cruce de cuatro vías fluviales cerca del antiguo puerto de Leiden, prestando servicio a marineros, trabajadores de los muelles...

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Desde entonces, el puerto ha perdido gran parte de su valor económico y ahora es utilizado principalmente por los entusiastas de la navegación, por lo que el urinario se utiliza con mucha menos frecuencia. Permanece abierto, pero por desgracia, su interior sigue siendo bastante apestoso.

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Vía: Atlas Obscura