jueves, 11 de marzo de 2021

El sombrero no es de rojos

  Cuando comienza la Guerra Civil española, cunde el entusiasmo revolucionario en la zona republicana. Las calles se llenan de paisanos vestidos con mono de trabajo, pañuelo rojo, tocados de gorrillos con puntas y otros atrezzos. El sombrero y la corbata quedan despretigiados por sus connotaciones burguesas, son prendas propias de los explotadores del obrero.

  En Solidaridad Obrera, un artículo establece que "el sombrero es una pieza indumentaria antiestética, innecesaria y mientras en la calle no se vean, la revolución habrá triunfado. 

 


 

  El gremio de los sombrereros se siente agredido y replica en defensa de su medio de vida: "Afirman reputados doctores que de ir sin sombrero con la cabeza descubierta se derivan males como el reblandecimiento de la masa encefálica por influencia del sol y el perjuicio de la vista falta de la protección del ala del sombrero o visera de una gorra. Todo el mundo debe cubrirse la cabeza".

  Tras esto, Solidaridad Obrera, modifica su postura inicial y reconoce que el sombrero y la gorra son buenos e incluso aconsejables para la salud. No obstante el uso del sombrero decae bastante en la zona republicana. De hecho, al terminar la guerra, la sombrerería madrileña Brave, que vuelve a abrir sus puertas, anunciará: "Los rojos no usaban sombrero". 

 


 

 

Vía: Una historia de la Guerra Civil que no va a gustar a nadie

1 comentario:

Archivo del blog

Etiquetas