En una era de informativos de 24 horas al día, pocos de nosotros ignoramos la brutalidad de la guerra. Las imágenes desgarradoras de las zonas asoladas por la guerra son grabadas y difundidas con facilidad. Pero hace un siglo esto era diferente.
En agosto de 1916 millones de británicos acudieron al cine. Anteriormente a la "Gran Guerra", las películas más populares eran las románticas, comedias... Pero la película que atrajo al público era un documental que se titulaba: "La batalla de Somme", una película compuesta de material de archivo de la línea del frente, que mostró al público la realidad de la guerra de trincheras.
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El cine en ese tiempo era una invención muy reciente, pero ya rivalizaba con las salas de música y el teatro como las formas más populares de entretenimiento en Gran Bretaña. En 1916, 20 millones de entradas de cine se vendían cada semana en todo el país. Esta forma emergente de entretenimiento de masas fue aprovechada para informar de las noticias en el frente. En 1916, se produjeron seis cortometrajes que contenían imágenes de soldados británicos en las trincheras.
"La batalla de Somme", de los camarógrafos Geoffrey Malins y JB McDowell, fue la primera de una serie de películas de larga duración sobre la Guerra, y la más exitosa con diferencia. La batalla de Somme, fue una de las campañas más terribles de la Guerra. Malins y McDowell comenzaron a filmar a finales de junio de 1916, las imágenes de los prolegómenos de la batalla, antes de filmar el infame primer día, el 1 de julio 1916, cuando más de 19.000 soldados británicos perdieron la vida. El rodaje continuó hasta el 10 de julio y menos de un mes después, todo el material se había condensado en una sola película, que fue estrenada el 7 de agosto.
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La película fue un gran éxito. Se estima que alrededor de 20 millones de entradas fueron vendidas en las primeras seis semanas de exhibición. Se cree que más de la mitad de la población de Gran Bretaña fueron a ver la película. Tuvo el récord de espectadores en Gran Bretaña durante 60 años, hasta el estreno de Star Wars. La explicación de este éxito era evidente, por primera vez, imágenes en movimiento de la vida en la línea del frente llegaban a una audiencia masiva. Los civiles estaban ahora comprometidos emocionalmente con la guerra de una manera que no habían estado antes. La popularidad de la película hizo que los civiles no fueran indiferentes a lo que pasaba en el frente.
Los críticos elogiaron unánimemente la película, destacando su realismo. Sin embargo, su escena más famosa, que representa soldados saliendo de la trinchera para atacar al enemigo, es probable que sea falsa.
A pesar de sus limitaciones, "La batalla de Somme" proporciona una idea muy aproximada de las condiciones que experimentan los combatientes.
Vía: BBC
Interesante, gracias por compartirlo. Dejo una curiosidad si interesa: Fotos de la Primera Guerra Mundial en el contexto actual
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